martes, junio 30, 2015

El gallo y la comadreja (http://edyd.com/fabulas/esopo)

Tras varios días planeándolo, finalmente la comadreja consiguió capturar al hermoso gallo de un corral cercano. A pesar de que ya lo tenía entre sus garras, deseaba poseer una razón de peso para disfrutar mucho más con cada bocado.

La primera razón que la comadreja sostuvo contra el gallo, fue que por culpa de su poderosa voz, los hombres no podían conciliar el sueño por las noches. Una acusación a la que contestó el gallo diciendo, que si cantaba tan fuerte era para que se despertaran y pudieran así saber que comenzaba un nuevo día.

Con muy mala cara, la comadreja encontró otra razón contra la que esperaba que su presa nada tuviera que decir. Según ella, el gallo iba en contra de la Naturaleza, ya que le daba igual cortejar a una gallina, que a su propia madre o hermanas. Sin inmutarse demasiado, el gallo le contestó, que eso también lo hacía por sus dueños, ya que de esta manera las gallinas daban muchos más huevos.

- "Cáspita, dijo la comadreja muy enfadada, sabes defenderte muy bien con las palabras, pero en esta ocasión no te salvarán, ya que pienso comerte de todas formas".

Frase del Día (30-06-2015)

El problema no radica en mirar al pasado y recordar, el problema viene cuando uno vive en el pasado de forma continuada. Esto nos lleva a un temor al presente, a los desafíos que nos proporciona la vida, a lo incierto ya que si nos anclamos en el pasado vivimos un sentimiento de seguridad permanente por que conocemos lo que ocurrió y nos sentimos a salvo de todo, principalmente a salvo de la realidad que puede provocarnos un sentimiento de acoso continuo.
Pero no siempre vivimos en el pasado de forma cómoda sino que se puede hacer el retorno de forma obsesiva a un momento determinado de algo que deseamos no hubiera sido del modo que fue. Un ejemplo podría ser si en nuestra vida hemos estado enamorados profundamente de una persona y en una discusión se rompió esa relación, la persona volverá una y otra vez a ese punto de forma obsesiva queriendo cambiar la situación, por su cabeza rondarán cosas como "nunca debí decir aquello que hizo que la perdiera". Este es el error más común ya que lo pasado, pasado está y por mucho que se deseé que no fuera así no hay vuelta atrás, no podemos basar nuestra vida actual en eso ya que los síntomas más habituales de este comportamiento son la melancolía, pudiendo llegara estados depresivos, de tristeza, de impotencia por no poder volver atrás.