lunes, septiembre 19, 2016

Llegar a mi meta...

Una de las mayores debilidades de la especie hu­mana es la típica familiaridad del hombre con la utilizamos la pa­labra "imposible. Las causas más comunes de nuestros fracasos es el hábito de abandonar cuando uno es derrotado temporalmente. Cuando la derrota nos abruma, la actitud más lógica y mas fácil es abandonar, y eso es exactamente lo que hacemos la mayoría de los seres humanos. Cuando una meta que nos proponemos no tiene una fecha de cumplimiento puesta por nosotros mismos, porque tenemos el hábito o el vicio de no tener fecha de cumplimiento para la misma, queda como "en el aire" y este "estar en el aire" dificulta que nosotros asumamos un compromiso diario para alcanzar esa meta y eso tarde o temprano llevara al fracaso de esa meta y su posterior abandono. No disponer de una metodología para alcanzar tu meta sería como viajar y pretender llegar a tu destino sin disponer de un mapa, ni de indicaciones precisas. Por eso no te rindas, sigue luchando para llegar a esa meta, cueste lo que cueste. Los que abandonan fracasan, mientras que las personas que cumplen lo que se proponen, están muy ocupadas trabajando cada día para hacer realidad lo que han soñado y sigo caminando, paso a paso, sin prisas, pero sin pausas

Frase del Día (19-09-2016)

En lo más profundo de ti sabes que las casualidades no existen. Pasa que eso que llamamos oportunidad, pensamos que es algo intangible; algo que tiene que aparecer y anunciarse  para que podamos proceder. A las personas que siempre aprovechan las oportunidades les decimos "suertudos" o que para bautizarse se necesita un padrino. Sino conseguimos el empleo que queremos porque no llegó la oportunidad; no habitamos la vivienda que soñamos porque no tuvimos la oportunidad; no le hablamos de nuestros sentimientos a esa persona especial porque no vimos la oportunidad; no vivimos la vida que quisiéramos tener porque la oportunidad nunca tocó a nuestra puerta. No sera porque hay algo que estamos haciendo mal?