sábado, octubre 08, 2016

Le educación no solo compete al colegio

Hoy leo que 12 "valientes" en Mallorca, digo "valientes" por no llamarlos otra cosas y por que son menores de edad, han golpeado a una cria de ochos años. Estos "valientes" sus edades comprenden entre los 12 y los 14 años, y que gracias a la "Ley del Menor" practicamente no recibiran ni castigo, cuando deberían ser expulsados de ese colegio directamente y sin perdón
Hoy en día, muchos padres o incluso la misma familia, creemos que con llevar a sus hijos al colegio es suficiente y mientras se dedican a malcriarlos, desatendiendo a enseñarles los valores y el respeto a los demás sean compañeros o sean maestros. Hoy en día sorprende ver a crios de primaria (1º a 6º) que hacen burla del profesor, hasta donde hemos llegado?.
Por otro lado, los profesores deberian vigilar más en los patios, en las clases y si ven un compartamiento inadecuado expulsarlos de la clase y llevarlo como pasaba antes a dirección y que esta llame a los padres y se hagan cargo de esos "valientes" que lo que hacen es entorpecer a que lo demás den más de sí. A los crios desde la más tierna edad, hay que enseñarles a como comportarse en sociedad. La escuela esta para aprender aquello que un día necesitara para ser un "parado" más, porque es el futuro que vemos en nuestra juventud. Claro que mis palabras, para la mayoría de la gente o de los que tienen hijos ahora, no es políticamente correcto decirlo, piensa que bastante tienen con su trabajo como para dedicarse a la educación de sus "valientes", que aunque por suerte no lo son todos, puede irse sumando a ese grupo más compañeros, porque hace gracia ese que se rie del profesor o es el más fuerte porque pega. Al final no estamos tan lejos de  la jungla, la víctima, una vez hecho el daño, recibe cuatro disculpas de mala gana, se traslada a los maestros que lo han ignorado, y a otra cosa, porque a los chicos, no les exigen responsabilidades, son menores, y los padres, asesorados se harán las víctimas, la culpa es del colegio, del niño que es agredido por no defenderse (en este caso poco podia hacer a ser 12 "valientes". Hoy en día se cree (en el cole) que con castigar al niño, sin patio es suficiente. Puede serlo en el cole, pero si los padres en vez de repremirles o reirles las gracias, lo castigaran sin salir, sin la consola, sin todo aquello que le gusta, veriamos si aprenden la lección. Aqui todo el mundo será una víctima pronto, menos la pobre cría, que está viva de milagro, según dicen las noticias publicada en la prensa. Y a los padres de los agresores les preguntaría y si un niño mayor, le rompiera la cabeza... como os sentiriais?

Frase del Día (08-10-2016)

Todo depende de a la persona que le fallas, si son amores "imposibles" que no te ha quedado más remedio que olvidar, que los guardas en algún lugar de tu corazón para que no te haga daño o si son amores muy queridos de muy temprana juventud que acabaron precísamente por esa juventud, si vuelven a aparecer en tu vida, puede que sea muy posible que vuelvas a sentir algo por ellos y más si tu corazón está libre, en esos momentos
Pero no son solo los recuerdos, son las personas, esa atracción, ese feeling o la sintonía que tuviste con alguien en un momento de tu vida. Esto puede reanudarse no solo viviendo de esos recuerdos, sino de crear unos nuevos con esa persona lo que tanto te gustó en su día, lo que tanto te unió a ella, su interior, sus gestos, sus miradas cómplices...
Solemos ser los mismos siempre y nuestras atracciones no suelen variar, nuestros gustos y deseos. Algunas veces incluso buscamos en la nueva pareja, lo que nos gustaba de la anterior y eso no dejara de ser un error, todos somos diferentes y eso es lo que nos hace ser especiales
Es posible que haya ocasiones que solo te valgan los recuerdos, pero creo que en otras lo que cuenta es que vuelves a sentir esa atracción por ella, las personas especiales de tu vida (siempre que el fin de una relación no haya sido "dramático" o doloroso por definirlo de alguna manera), esas personas tienen susposibilidades... solo por el solo hecho de no cerrar esa puerta para siempre